Descripción general
P
aro cardíaco repentino
El paro cardíaco repentino (SCA) es una afección en
la que el corazón deja de bombear sangre de forma
efectiva a causa de una disfunción del sistema
eléctrico cardiovascular. A menudo, las víctimas
de paradas repentinas no perciben síntomas
previos. Los SCA pueden ocurrir en personas con
afecciones cardíacas previamente diagnosticadas.
La supervivencia a los paros cardíacos repentinos
depende de una reanimación cardiopulmonar efectiva
e inmediata (RCP).
El uso de un desfibrilador externo en los primeros
minutos del colapso puede incrementar de forma
significativa las posibilidades de supervivencia del
paciente. El ataque cardíaco y el SCA no son lo mismo,
aunque algunas veces un ataque cardíaco puede
derivar en una parada cardiorrespiratoria (SCA). Si
experimenta síntomas de un ataque cardíaco (dolor
de pecho, presión, falta de aire, presión pectoral u en
otra parte del cuerpo) busque atención médica de
inmediato.
Ritmo sinusal y fibrilación ventricular
El pulso cardíaco normal, conocido como ritmo
sinusal, genera una actividad eléctrica que contrae el
músculo del corazón de forma coordinada Esta acción
genera el flujo normal de la sangre a través del cuerpo.
La fibrilación ventricular (V-fib o VF) es una afección
que produce una contracción no coordinada del
miocardio, con espasmos en lugar de contraerse
de forma adecuada. La fibrilación ventricular es la
arritmia más habitual de los pacientes con SCA.
En las víctimas que sufren un paro cardíaco
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repentino es posible restablecer el ritmo sinusal
normal mediante descargas eléctricas al corazón.
A este tratamiento se le conoce con el nombre de
desfibrilación.
Taquicardia ventricular
La taquicardia ventricular (VT) es un tipo de
taquicardia (latidos rápidos) producto de una
actividad eléctrica inadecuada en el corazón. La
taquicardia ventricular empieza en las cámaras
inferiores del corazón, denominadas ventrículos.
Aunque hay muchos tipos distintos de VT, esta
arritmia puede ser mortal si el paciente no tiene pulso
y está inconsciente. Si no se trata con desfibrilación
inmediata, la taquicardia ventricular puede ocasionar
otras arritmias.
Tratamiento con DEA
Existe una concepción errónea generalizada de que la
RCP por si sola y la llamada al servicio de emergencias
son suficientes. La RCP es una medida temporal que
mantiene el flujo sanguíneo y de oxígeno al cerebro.
Pero la RCP por sí sola no devuelve el ritmo normal al
corazón durante la VF o VT. La clave de la supervivencia
es la desfibrilación y mientras más pronto se realice,
mejor.
La desfibrilación es un tratamiento habitual para
arritmias potencialmente fatales, en concreto, la
fibrilación ventricular. La desfibrilación consiste
en aplicar descargas eléctricas al corazón con un
dispositivo llamado desfibrilador. Dicho proceso
restablece las contracciones normales del miocardio
y permite que el marcapasos natural del corazón
reanude el ritmo sinusal normal.