Objetivo:
Asegurar un almacenaje seguro del hielo, sin que efectué a su estado físico y que sea
aséptico.
Descripción:
El equipo que se utiliza para almacenar el hielo después que se produjo se ubica en el
interior de un cuarto frió, con las siguientes características:
El cuarto frió tiene 34'9" (10.6 m) de largo, por 21' 4" (6.5 m) de ancho y 12' (3.65 m)
de altura. La puerta de acceso tiene 73" de alto por 38 ½" de ancho y se ubica a 58 ½" de
distancia de la pared donde se encuentra la descarga.
En su interior se encuentra el recipiente del rastrillo, centrado a lo ancho y junto a ala
pared que se encuentra a la izquierda del acceso. En este mismo lado se encuentra
también el gusano de descarga que eleva el hielo al vibrador que alimenta la tolva de
envasado.
Todos los lados del cuarto frió están cubiertos por un material aislante térmico de
poliuretano, de 4" de ancho. Se incluye el piso y el techo. La puerta también esta
manufacturada con el mismo material aislante. La puerta de acceso, cuanta además en su
interior con una cortina de tiras de plástico, fijas desde la parte superior.
Para mantener la temperatura bajo el punto de congelación se cuanta con dos equipos,
que trabajan en paralelo, con gas freon 504, integrados cada uno por lo siguiente:
• Un compresor 5 hp
• Un condensador, con dos abanicos.
• Un evaporador, con dos abanicos.
• Válvula de expansión.
• Termostato.
Los compresores y sus respectivos condensadores se encuentran afuera del cuarto frió, a
la intemperie, protegidos por un tejaban. Los evaporadores se encuentran en el interior
del cuarto frió, colgados del techo, al lado derecho del acceso.
Alcance:
Esta actividad permite un almacenaje continuo y eficiente del hielo, mientras espera su
turno para ser envasado, lo que redunda en la productividad de la planta.