Tarjeta de memoria
Cada transmisor posee un código personal (elegido entre más de 250 millones de códigos) que lo
distinguen de cualquier otro control remoto. El receptor es capaz de recibir todos los códigos, pero
se activará sólo si dicho código está presente en la lista de los códigos "autorizados", la cual se
encuentra en la tarjeta de memoria.
Los receptores se entregan ya equipados con un tarjeta de memoria BM250, que puede contener un
máximo de 63 códigos (límite máximo 63 controles remotos). También puede ser usada una tarjeta
de memoria BM60 con un límite máximo de 16 códigos, o BM1000 con un límite máximo de 255
códigos, que tienen que ser montadas en sustitución de la tarjeta BM250 suministrada de serie.
Cuando es alimentado, el receptor visualiza el tipo de memoria usada: si hay una tarjeta de memoria
BM60, la luz indicadora parpadeará una vez; si en cambio hay una tarjeta de memoria BM250, la luz
indicadora parpadeará dos veces; mientras que si hay una tarjeta BM1000, la luz indicadora
parpadeará tres veces.
Todos los códigos se encuentran en la memoria, por lo tanto, cuando se requiere la máxima
seguridad, es necesario bloquear la función de aprendizaje de los códigos (incluso por el hecho de
que puede efectuarse a distancia). Tras haber introducido los códigos de los controles remotos, es
suficiente cortar el trazo indicado con una flecha (fig. 4). Si luego desea introducir otros códigos, una
los trazos con una gota de estaño (fig. 5).
¡ ATENCIÓN !: Introduzca y quite la tarjeta de memoria con el receptor apagado.