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Mantenimiento diario
Mantenga su audífono limpio y seco. Limpie la carcasa con un paño suave o un papel después de su uso
para eliminar la grasa o la humedad. Evite la exposición de su audífono directamente a la humedad, como la
lluvia o el agua de la ducha. Si el audífono se moja o si ha estado expuesto a alta humedad o transpiración,
debe dejar que se seque durante la noche con la pila fuera y el compartimento de la batería abierto.
También es recomendable ponerlos en un recipiente sellado junto con un agente de secado (desecador)
durante la noche. Consulte a su audioprotesista qué agente de secado utilizar.
El audífono está protegido por un nanorevestimiento hidrófugo: HPF80 NanoBlock. Esta protección mejora
la durabilidad del aparato, repeliendo la humedad y la suciedad. Sin embargo, para evitar reparaciones
fuera de garantía:
• Nunca sumerja el audífono en agua u otros líquidos, ya que esto puede causar daño permanente a los
circuitos.
• Proteja su audífono de un uso brusco y evite golpearlo contra superficies duras o suelos.
• No deje el audífono al sol o cerca de una fuente de calor o luz solar directa, ya que puede causar daños
al aparato y deformar la carcasa o el tubo del auricular.
Recomendaciones al guardar su audífono
Cuando no utilice el audífono, consérvelo o transpórtelo en la caja suministrada. Deje abierto el portapilas.
Mantenga el audífono en un lugar seco, no en el baño ni en otros lugares húmedos. Como alternativa,
puede guardar el audífono en un desecador a disposición de su audioprotesista.
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