• Una vez extraída la membrana, limpie el interior del contenedor con agua, sin
cloro, de esta forma eliminará suciedades y el agua actuará como lubricante para
colocar la nueva membrana.
• Saque la nueva membrana de su envoltorio. (Habitualmente el envoltorio consiste
en una bolsa de plástico herméticamente cerrada).
• Compruebe que el tubo de permeado de la membrana ajusta bien sobre las juntas
tóricas interiores de los tapones de cierre.
• Coloque en el contenedor la membrana entrándola por el lado contrario por el que
la hemos sacado procurando dejarla centrada para que el collarín central quede
sobre el casquillo de la membrana.
• Roscar los tapones de cierre que habíamos sacado anteriormente y vuelva a poner
el tubo de agua osmotizada.
Al poner el equipo nuevamente en marcha, proceder como en el Capítulo I apartado 5
PRIMERA PUESTA EN MARCHA SIGUIENDO DETALLADAMENTE TODOS
LOS PASOS QUE SE CONSIGNAN EN EL MENCIONADO APARTADO.
Capítulo IV Página 2