4.2.2
Funcionamiento con agua fría
1. Coloque el interruptor del motor en la posición de
encendido,así como la válvula de combustible (si se
suministra con) y ajustar el estrangulador según sea
necesario, entonces arrancar el motor con la cuerda de
retroceso.
2. Desbloquee la pistola de pulverización y apriete el gatillo.
3. Se pulveriza agua a alta presión.
4. Suelte el gatillo y bloquee la pistola de
pulverización cuando no esté en uso.
4.3
Uso de productos de limpieza
La máquina viene con un
inyector incorporado que
requiere el inyector del jabón
que se instalará. Enjuague
después de usarlo.
5 Aplicaciones y métodos
5.1
Técnicas
5.1.1
Mojado
5.1.2
Detergente y
espuma
5.1.3
Temperatura
5.1.4
Efecto mecánico
5.1.5
Alto flujo de agua
o alta presión
6
PRECAUCIÓN
No dejar secar nunca el
producto de limpieza sobre la
superficie que se va a limpiar.
La superficie puede dañarse.
La limpieza de alta presión eficiente se logra siguiendo unas cuantas
pautas, combinadas con su propia experiencia personal en tareas de
limpieza específicas. Los accesorios y detergentes, cuando se eligen
correctamente, pueden aumentar la eficiencia de su limpiador a
presión. La siguiente es información básica sobre la limpieza.
Las capas incrustadas o gruesas de suciedad se pueden ablandar o
suavizar mediante un período de remojo. Este es, por ejemplo, un
método ideal dentro de la agricultura; por ejemplo, para los establos.
El método de remojo ideal se puede lograr utilizando espuma o un
simple detergente alcalino. Deje reposar el producto sobre las
superficies sucias durante unos 30 minutos antes de limpiar a
presión. El resultado será un proceso de limpieza a alta presión
mucho más rápido.
Se debe aplicar espuma o detergente sobre las superficies secas para
que el producto químico esté en contacto directo con la suciedad. Los
detergentes se aplican de abajo hacia arriba, por ejemplo en la
carrocería de un automóvil, para evitar áreas "super limpias", donde el
detergente puede acumularse en altas concentraciones y chorros
hacia abajo. Deje que el detergente actúe durante varios minutos
antes de enjuagar y nunca lo deje secar sobre la superficie que desea
limpiar.
Los detergentes son más eficaces a temperaturas más altas. Grasas,
aceites y lubricantes se descomponen más eficazmente a temperaturas
más altas también. Las proteínas se pueden limpiar a temperaturas de
alrededor de 60 °C. Los aceites y la película de rodadura a unos 70 °C
y la grasa se pueden limpiar a 80 - 90 °C.
Para romper las capas de suciedad más resistentes, puede ser
necesario un efecto mecánico adicional. Lanzas especiales y cepillos
rotativos o de lavado ofrecen este efecto complementario que corta la
suciedad.
La presión alta no siempre es la mejor solución y puede dañar las
superficies. El efecto de limpieza depende también del caudal de
agua. Los niveles de presión de alrededor de 100 bar (1450 psi)
pueden ser suficientes para la limpieza de vehículos (además de agua
caliente) y los niveles de agua más altos permiten enjuagar y eliminar
grandes cantidades de suciedad fácilmente.