Según el grado de contaminación en la zona donde el toldo está instalado, se
recomienda una limpieza regular del mismo.
Importante: No se apoye nunca en el toldo ni se sujete en él.
Eliminar el polvo periódicamente con un cepillo blando en estado seco. Eliminar
de inmediato las hojas y cualquier otra suciedad similar.
Eliminar manchas pequeñas de la tela del toldo con un producto específico para
lonas, o de uso corriente para lavar textiles delicados, preferentemente líquido,
diluido en agua (temperatura del agua alrededor de 30ºC, solución jabonosa
5%)
Enjuagar bien con agua hasta eliminar completamente cualquier residuo del
producto.
Dejar secar totalmente la lona antes de enrollar el toldo de nuevo.
No utilizar disolventes ni detergentes abrasivos.