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Debe procederse con suma cautela al tratar zonas cercanas al ojo.
Se requiere que el paciente se ponga un protector ocular para evitar lesiones en los ojos.
o
El haz del láser debe apuntarse SIEMPRE en dirección opuesta al ojo y aplicarse sólo a la piel exterior del
o
reborde orbitario.
En muchos casos puede aumentarse la distancia a la órbita tirando de la piel hacia fuera del ojo para el
o
tratamiento.
ATENCIÓN POSTERIOR AL TRATAMIENTO
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El eritema es frecuente y desaparece con el tiempo.
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Si se forma una ampolla o costra, trátela igual que una herida.
CUIDADO DEL LÁSER
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Apague la unidad o póngala en la modalidad "Reserva".
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Entre un paciente y el siguiente, desinfecte la pieza de mano completa y su cable con una toallita desechable
germicida tal como Sani-Cloth®.
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La ventana del láser debe limpiarse después de cada tratamiento para evitar que se dañe.
Limpie la ventana con un aplicador con punta de algodón, humedecido con una pequeña cantidad de acetona de
o
calidad óptica.
No utilice productos tales como Q-tips, ya que contienen un adhesivo que se disuelve cuando se pone en
o
contacto con la acetona.
Si la ventana se daña, se deberá adquirir una de recambio.
o
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Limpie la parte inferior del láser (entrada de aire).
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En el manual del usuario o la presentación sobre mantenimiento del sistema encontrará información adicional sobre
el cuidado del láser.
© Junio de 2010, D0028 Rev. E
IDEM JOB No. 1011-169 PAGE 6 – Spaish version
GenesisGuidelines_Nov2010_DO028RevE
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