4 LIMPIEZA
Si bien la cerradura ha sido especialmente diseñada y producida para un uso continuado en ambientes húmedos, se deben cumplir
las siguientes indicaciones para un correcto mantenimiento de la misma:
Limpiarla con un paño suave y húmedo (no usar ningún producto detergente) y a continuación secarla completamente.
No sumerjirla.
Protejerla del agua.
No exponerla a la luz directa del sol o a temperaturas extremas.
No dejarla caer.
No someterla a fuertes impactos.
No desmontarla.
ATENCIÓN: En caso de limpiar la instalación por medio de chorros de agua, es necesario tener cerradas las puertas de las
taquillas de la instalación para mantenerlas libre del efecto de sustancias corrosivas que aceleran el desgaste.