•
Las piezas sustituidas son por tanto propiedad de Karbones.
•
Las nuevas piezas no darán lugar en ningún caso a una prolongación de la garantía del
producto.
•
Cualquier producto montado o utilizado no puede devolverse, descambiarse ni reem-
bolsarse.
•
La responsabilidad derivada de la venta se limita a la garantía que previamente descrita.
•
Esto excluye la posibilidad de recurrir a sanciones y a daños y perjuicios.
•
Las normas pueden cambiar en función de los territorios después de la elaboración del
presente manual, en cuyo caso podría ser necesaria una adaptación.
•
Cualquier modificación del producto conlleva la anulación de la garantía y puede
conllevar riesgos durante la utilización.
•
Intercambiar las piezas de un equipo a otro conlleva la anulación de la garantía.
•
Para disfrutar de la garantía, ponte en contacto con tu vendedor.
11. Normas y reglamentación
•
La botella y el regulador de presión cuentan con la certificación CE.
•
El compresor también cuenta con la certificación CE.
•
En determinadas regiones, algunas de las cuales podrían pertenecer a la Unión Euro-
pea, es posible que se apliquen otras normas o reglas.
12. Qué hacer y no hacer durante la inmersión
El incumplimiento de estas instrucciones puede exponerte a peligros con graves
consecuencias para tu salud.
Introducción
El submarinismo es una actividad peligrosa si se practica sin conocer las normas de segu-
ridad.
En este documento encontrarás los principales consejos relativos a lo que hay que hacer y
no hay que hacer para que tus inmersiones sean solo momentos agradables.
Los instructores de buceo cualificados pueden proporcionarte más consejos.
Normas y consejos básicos
Antes de bucear, es muy recomendable consultar a un médico para que evalúe tu ap-
titud para bucear.
Si sufres enfermedades cardiovasculares, asma, diabetes, enfermedades cardíacas o vas-
culares, enfermedades otorrinolaringológicas, epilepsia u otros problemas neurológicos, se
desaconseja por completo la práctica del submarinismo.
Esto se aplica también a las enfermedades transitorias, como el resfriado, la sinusitis, la
bronquitis, una infección nasal, de la garganta, de los oídos (otitis) o de los dientes (caries).
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