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Aconsejamos que no haya fuentes de calor ni iluminación en la estructura o cerca de ella.
3/ Mantenimiento
Es habitual que el producto presente un desgaste natural con el paso del tiempo y el uso, lo que se
traduce en un deterioro de los colores y los acabados superficiales, de las funciones mecánicas y de
la estanqueidad de los elementos.
Exposición a los rayos UV
Es normal que materiales como los textiles y las pinturas se decoloren con la luz ultravioleta.
Cada rayo de sol o de luna crea una nueva variación en el material.
Los colores normalmente se desgastan debido a la exposición al mundo exterior.
Apretando
Su producto necesita un mantenimiento regular para seguir funcionando. Si realiza usted mismo
estas reparaciones con regularidad, puede mejorar la longevidad del producto. Recuerde que debe
apretar los componentes con regularidad.
Mantenimiento regular
Es importante mantener el producto adecuadamente para que no se deteriore.
Una estructura de acero tiene la ventaja de que no hay que invertir en productos o materiales
demasiado específicos.
Todo lo que necesitas es :
- Una esponja suave;
- Un paño de microfibra;
- Y un chorro de agua.
Una vez hecha la limpieza, aclara con agua limpia (puedes usar un chorro, si no es de alta presión).
No olvides aclarar también los pies para que no quede suciedad.
Por último, puedes terminar tu trabajo limpiando la estructura con un paño de microfibra para
secarla y devolverle el brillo.
- No utilice productos abrasivos ni detergentes (lejía, acetona, etc.) que puedan dañar el acero.
- No utilice un cepillo de cerdas duras, que también podría dañar la estructura.
- No utilice un chorro de alta presión.
Para el lienzo, sácalo del bastidor, despliégalo y colócalo sobre el césped o la terraza (evita las
superficies pedregosas que podrían dañarlo).
Cepille o barra la zona para eliminar la suciedad acumulada, como el polvo, las hojas, etc.
Utiliza una esponja suave con agua tibia y jabón para eliminar las manchas y la suciedad que hayan
quedado.
Por último, deja que el lienzo se seque por completo.
Se recomienda limpiar el tejido de 3 a 4 veces al año.
Para evitar la aparición de humedad y moho, le recomendamos que guarde la tela en un lugar
cerrado y seco durante las estaciones de otoño e invierno.
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