hace falta aumentar el valor de regulación hasta comprobar el
encendido al que tiene que seguir la suspensión inmediata en
"bloqueo" del quemador. Desbloquear el quemador pulsando el
botón correspondiente y volver a poner la regulación del preso-
stato en un valor suficiente como para detectar la presión del
aire durante la etapa de preventilación.
13) La tarea de los presostatos de control de la presión del gas
(mínima y máxima) es la de impedir el funcionamiento del
quemador cuando la presión del gas se coloca entre los valores
previstos. De la función específica de los presostatos resulta
evidente que el presostato de control de la presión mínima tiene
que utilizar el contacto que está cerrado cuando el presostato
detecta una presión superior a la en que está regulado. El
presostato de máxima presión tiene que utilizar el contacto que
está cerrado cuando el presostato detecta una presión inferior a
la de su regulación. La regulación de los presostatos de presión
del gas mínima y máxima tiene entonces que llevarse a cabo
en el acto del prueba del quemador, según la presión detectada
en cada caso. Por esta razón, el encendido (en el sentido de
apertura del circuito) de cualquier presostato del gas no permite
la activación del equipo y consecuentemente del quemador.
Cuando el quemador funciona (llama encendida), la activación
de los presostatos del gas (apertura del circuito) ocasiona
inmediatamente el bloqueo del quemador. En el acto de la
prueba es necesario verificar el funcionamiento correcto de los
presostatos. Utilizando adecuadamente los correspondientes
mecanismos de regulación es posible asegurarse de la
intervención del presostato (apertura del circuito) que debe
determinar el bloqueo del quemador.
14) Verificar el funcionamiento del detector de llama como se
describe a continuación:
- desenchufar el cable que procede del electrodo de ioniza-
ción,
- Activar el quemador;
- el equipo llevará a cabo el ciclo de control y dos segundos
después ocasionará el bloqueo del quemador por falta de
llama de encendido;
- apagar el quemador;
- Volver a enchufar el cable al electrodo de ionización.
Es preciso llevar a cabo un control incluso cuando el quemador
ya está encendido; desenchufando el cable que procede del
electrodo de ionización el equipo tiene que posicionarse en
posición de "bloqueo".
15) Verificar la eficiencia de los termostatos o presostatos de caldera
(la intervención debe parar el quemador).
Asegurarse de que el encendido se realiza regularmente
!
porque, si el mezclador no está en la posición correcta,
la velocidad del aire de salida puede ser demasiado
elevada y obstaculizar el encendido. Si pasa esto,
hace falta desplazar gradualmente el mezclador hasta
lograr una posición en que el encendido se realiza
regularmente y aceptar esta posición como definitiva.
Volvemos a repetir que, para la llama de encendido, es mejor
limitar la cantidad de aire al nivel mínimo para lograr un
encendido seguro, incluso en los casos más difíciles.
M E D I C I Ó N D E L A C O R R I E N T E D E
IONIZACIÓN
La corriente mínima para que funcione el equipo se cifra en 1,4 µA.
El quemador proporciona una corriente muy superior que no requiere
normalmente de ningún control. De todas formas, si se quiere medir
la corriente de ionización hay que conectar un microamperímetro
en serie con el cable del electrodo de ionización como se muestra
en el dibujo
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