Limpieza del vidrio
Para la limpieza del vidrio se pueden utilizar productos
específicos (véase nuestro catálogo Glasskamin).
No rociar el producto sobre las partes barnizadas o
las juntas de la puerta. Como alternativa al producto,
se puede usar un paño impregnado con un poco de
ceniza blanca y una hoja de periódico (diario). Prestar
atención a que no haya elementos abrasivos en la
ceniza que puedan rayar el vidrio.
La
vitrocerámica
productos tiene una resistencia al calor
de aproximadamente 750°C y se ensaya y
controla antes y después del montaje para
verificar la presencia de grietas, burbujas
y ampollas. El vidrio, a pesar de su elevada
resistencia a la temperatura, es un elemento
frágil y por tanto se aconseja manipular la
puerta con cuidado, sin golpearla ni forzarla.
El vidrio, al ser un elemento no elástico, puede
romperse.
Eliminación de las cenizas (sólo con el
hogar apagado y frío)
Sacar la rejilla y retirar la cuba.
18
Eliminar las cenizas con una palita o un aspirador de
cenizas.
Guardar
las
cenizas
combustibles; recordar que las brasas residuales
pueden encenderse aun pasadas las 24 horas desde
la última combustión.
MANTENIMIENTO
instalada
en
los
sólo
en
recipientes
no
Limpieza de las partes exteriores
El revestimiento debe limpiarse sin utilizar detergentes
agresivos.
No mojar con agua fría cuando el revestimiento está
caliente ya que el choque térmico podría provocar
daños.
Limpieza del conducto de humos
Debe efectuarse antes de la temporada de uso y cada
vez que se observe en el interior la formación de una
capa de hollín y brea, sustancia fácilmente inflamable.
Las incrustaciones, en presencia de elevadas
temperaturas y de chispas, pueden incendiarse con
graves consecuencias tanto para el conducto de
humos como para la vivienda. Se aconseja, por tanto,
efectuar la limpieza al menos una vez al año. Verificar
la normativa local.