Todo esto no tendría demasiada importancia, si no fuera porque este espíritu de opinión
llega a las aulas y es fácil comprobar como casi todos los alumnos de Educación Secundaria tie-
nen su teléfono móvil de última generación, su reproductor mp3 y mp4, pero casi ninguno usa ni
sabe usar una calculadora científica.
Pero lo realmente preocupante es cuando, en la Universidad, en los grupos de Ingeniería y
Arquitectura, apenas si una tercera parte del alumnado acude a las clases llevando su calculadora
científica. Eso sí, el día del examen, casi todo el mundo las usa, pero ... ¿saben realmente cómo
manejarla?, ¿saben sacarle todo el rendimiento a sus posibilidades?.
La otra cuestión es, ¿qué calculadora usar?. Prácticamente, las dos terceras partes de ese
tercio de alumnos, llevan calculadoras al aula perfectamente apropiadas para realizar la suma de
la compra en el "hiper" pero absolutamente inútiles para un nivel universitario técnico, calcula-
doras con una pantalla donde aparece una sola cantidad que va borrándose conforme avanza el
cálculo. Pero ¿qué ocurre cuando tenemos que resolver sistemas de ecuaciones, multiplicar ma-
trices, resolver ecuaciones cuadradas o cúbicas, hacer un producto vectorial, ...etc?. Estas son
operaciones habituales dentro de la complejidad del cálculo ingenieril y el disponer de una cal-
culadora que permita realizar estos cálculos y sobre todo; "saber usarla", puede llegar a suponer
la diferencia entre el aprobado o el suspenso en una asignatura.
Personalmente, cuando vigilo un examen y veo a los alumnos usar calculadoras absoluta-
mente inútiles para resolver cálculos complejos, pienso en el esfuerzo que se podrían evitar y la
indiscutible mejora en sus calificaciones de usar una herramienta de cálculo adecuada, al igual
como el ejemplo del obrero usando un pico, una pala y un saco en vez de usar una excavadora.
Sin embargo, no debe pensarse que sea necesario realizar una fuerte inversión para acceder
a una calculadora eficaz, con apenas 20-25 euros podemos disponer de una máquina de calcular
capaz de ayudarnos en la resolución de los problemas.
Por otro lado, cuando un alumno compra una calculadora, rara vez lee las instrucciones, se
limita a usar las más habituales e ignora todas las posibilidades que encierra. De ahí la intencio-
nalidad de este sencillo manual; servir de ayuda y recordatorio para el uso de la calculadora e in-
tentar explicar todos los detalles, algunas veces ocultos, y que de haberlos conocido hubieran
ahorrado esfuerzo y principalmente, hubieran ahorrado ese tiempo precioso y siempre escaso de
Vicente Viana Martínez
Manual de uso de la calculadora científica Casio fx-570ES
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