Simples costumbres que te
aconsejamos poner en práctica:
• Cuando estés cambiando al bebé, llama su atención con un
juego, de manera que tenga que mover la cabecita hacia la
derecha y hacia la izquierda; esto hará que se acostumbre a
no estar siempre girado hacia el mismo lado.
• Lleva al bebé en brazos siempre que puedas.
• Es preferible que utilices un fular portabebés o una mochila
de porteo durante las siestas del bebé y las actividades
cotidianas.
• Cuando esté en el moisés, la cuna o el gimnasio para
bebés, cambia de posición sus juguetes y móviles, así tendrá
que girar la cabecita hacia diferentes direcciones.
• Utiliza una almohada para amamantar o un cojín de
lactancia, de esta manera el bebé no estará apoyado
directamente sobre los brazos.
• El bebé os buscará siempre con la mirada, así que, si •
compartís habitación, cambiadle la posición de la cuna, para
que no se gire siempre hacia el mismo lado.
• Si fuera posible, mientras esté despierto, que pase el
menor tiempo posible en la cuna, cochecito u hamaca.
• Desde que cumpla los 2 meses, mientras esté despierto
y sólo si está bajo la supervisión de un adulto, el Tummy
Time puede ayudarlo. Colocadlo tumbado boca abajo,
estimulándolo para que mantenga la cabeza recta. Este
ejercicio lo ayudará a reforzar los músculos del cuello y de la
espalda.