Cada vez que ladre, su perro oirá y/o recibirá un estímulo. Relacionará
su ladrido con el estímulo y dejará de ladrar. El perro puede tardar unos
días en percibir la asociación.
Sin el collar, el perro volverá a su comportamiento ladrador.
El collar no deberá dejarse de manera constante en torno al cuello de
su perro, sino únicamente cuando no desee que ladre.
III - ACTIVACIÓN DEL DISPOSITIVO
3.1 - Elegir los electrodos
Dispone usted de 2 juegos de electrodos.
Elija los electrodos en función del pelaje del perro:
• perro de pelo largo = electrodos largos
• perro de pelo corto = electrodos cortos
Para fijar los electrodos en el collar, basta con apretarlos con la mano,
sin herramienta.
3.2 - Colocar la pila
Abra la trampilla de la pila con la ficha-destornillador.
Introduzca la pila 3V de litio, respetando la polaridad que se indica en
el cajetín.
3.3 - Poner el aparato en marcha
Pase la ficha-imán rápidamente por delante del punto verde (contacto
magnético): emisión de un bip sonoro + LED verde encendido durante
50 µs: el aparato ya está listo para ser utilizado.
El collar está configurado en Modo 1 (ver cap. 4 "Los distintos modos
de funcionamiento").
El aparato está en servicio (a la espera de un ladrido): el LED verde
parpeadea cada 4 segundos.
Manual de instrucciones del collar antiladridos - 2/4
3.4 - Ajustar el collar en torno al cuello del perro
Coloque el collar en torno al cuello del perro, apretándolo lo suficiente
(compruebe que puede pasar un dedo entre el collar y el cuello del animal).
Compruebe el cuello de su perro con regularidad. No utilice el
collar más de 8 horas al día.
IV - LOS MODOS DE FUNCIONAMIENTO
4.1 - Los 3 modos de funcionamiento
Cada estímulo se visualiza a través del encendido del LED.
Modo 1 : Emisión de un bip sonoro y 8 niveles progresivos de estímulos
electroestáticos en función de la frecuencia de los ladridos.
Funcionamiento
Un bip sonoro precede al estímulo electroestático, para que el perro
asocie el bip al estímulo.
Al primer ladrido, se emitirá un bip y un estímulo electroestático de
nivel 1, para avisar al perro. Si el perro vuelve a ladrar en un lapso
de 10 segundos, recibirá un segundo estímulo electroestático de
nivel 2.
Éste seguirá aumentando hasta que los ladridos cesen o se alcance
el nivel 8. El perro ajusta el estímulo electroestático a su nivel de
sensibilidad.
El nivel de estimulación en el que el perro dejó de ladrar quedará
guardado en la memoria hasta el próximo ladrido.
Si no ladra durante los siguientes 5 minutos, la intensidad del estímulo
bajará 1 nivel, y así sucesivamente hasta volver al nivel 1. El perro
sólo puede recibir 2 veces la estimulación de nivel 8, a continuación
el collar se vuelve a poner automáticamente en el nivel 1, y vuelve a
comenzar su progresión.