Uso recomendado
LA UBICACIÓN CORRECTA Y EL AJUSTE DEL MONITOR PUEDE
REDUCIR LA FATIGA EN LOS OJOS, HOMBROS Y CUELLO.
CUANDO INSTALE EL MONITOR, VERIFIQUE LO SIGUIENTE:
• Para garantizar el óptimo rendimiento, deje el
monitor en marcha durante 20 minutos para que
se caliente.
• Regule la altura del monitor de modo que la
parte superior de la pantalla quede apenas por
debajo de la altura de la vista. Sus ojos deben
mirar apenas hacia abajo cuando visualice la
mitad de la pantalla.
• Ubique su monitor a no más de 16 pulgadas
(40 cm) de proximidad y no más lejos de las 28
pulgadas (71 cm) de su vista. La distancia optima es 20 pulgadas (50 cm).
• Descanse la vista periódicamente concentrándose en un objeto ubicado al
menos a 20 pies (6 m). Parpadee con frecuencia.
• Ubique el monitor en un ángulo de 90° desde las ventanas y otras fuentes de
luz para minimizar el resplandor y el reflejo. Regule la inclinación del monitor
de modo que el techo no se refleje en su pantalla.
• Si el reflejo de la luz le dificulta la visión de la pantalla, use un filtro
antireflejos.
• Limpie la superficie del monitor LCD con un paño sin pelusas que no sea
abrasivo. ¡Evite utilizar soluciones limpiadoras o limpiadores para vidrios!
• Regule el brillo y los controles de contraste del monitor para mejorar la
legibilidad.
• Use un sujetador de documentos cerca de la pantalla.
• Ubique lo que esté mirando la mayor parte del tiempo (la pantalla o
material de referencia) directamente al frente para disminuir las veces
que gira su cabeza mientras escribe.
• Evite visualizar patrones fijos en el monitor durante un largo tiempo para
evitar la persistencia de la imagen (efectos postimagen).
• Contrólese la vista regularmente.
– continuación
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