es
Limpieza del aparato
m
¡Atención!
No utilizar detergentes y disolventes
■
que contengan arena, cloro o ácidos.
No emplear esponjas abrasivas. En
■
las superficies metálicas podría
producirse corrosión.
No lavar nunca las bandejas,
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compartimentos o estantes del
aparato en el lavavajillas. ¡Las piezas
pueden deformarse!
Modo de proceder:
1. Desconectar el aparato antes
de proceder a su limpieza.
2. ¡Extraer el cable de conexión de la
toma de corriente o desconectar el
fusible!
3. Retirar los alimentos y guardarlos en
un lugar lo más frío posible. Colocar
sobre los alimentos los acumuladores
de frío (caso de disponer de ellos).
4. Aguardar a que se haya
descongelado la capa de escarcha.
5. Limpiar el aparato con un paño suave,
agua templada y un poco
de lavavajillas manual con pH neutro.
El agua de lavado no debe penetrar
en la iluminación ni acceder a la zona
de evaporación a través del orificio
de drenaje.
6. Limpiar la junta de la puerta solo con
agua clara, secándola bien
a continuación.
7. Tras concluir la limpieza del aparato,
conectarlo a la red y ponerlo
en funcionamiento.
8. Volver a introducir los alimentos en el
aparato.
18
Consejos prácticos
para ahorrar energía
eléctrica
¡Emplazar el aparato en una
■
habitación seca y fresca, dotada de
una buena ventilación! Recuerde
además que el aparato no debe
instalarse de forma que reciba
directamente los rayos del sol, ni
encontrarse tampoco próximo a focos
activos de calor tales como cocinas,
calefacciones, etc.
No obstante, si esto último fuera
inevitable, se habrá de proteger la
unidad con un panel aislante
adecuado.
Seleccionar un hueco de montaje con
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una profundidad de 560 mm.
Un hueco de montaje de menor
profundidad dará lugar a una mayor
absorción de corriente.
Prestar atención a que las aberturas
■
de ventilación y aireación no estén
nunca obstruidas.
En caso de avería o corte del
■
suministro de corriente, colocar los
acumuladores de frío directamente
sobre los productos congelados en el
cajón o compartimento superior, con
objeto de evitar que los alimentos
puedan descongelarse.
¡Mantenga abiertas las puertas del
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aparato el menos tiempo posible a fin
de evitar al máximo las pérdidas de
frío!
Cuanto menos tiempo esté abierta la
puerta, menos escarcha o hielo se
forma en las rejillas congeladoras.