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8 |Material/cantidad de combustible
Combustible/cantidad
8
Material combustible
8.1
Leña
Muchas de nuestras leñas autóctonas pueden quemarse sin emisiones de CO2 en chimeneas tras un
secado adecuado. La leña se caracteriza por su regeneración, su gestión sostenible, la necesidad de
invertir poca o ninguna energía suplementaria en el combustible, y las breves distancias entre el
productor y el consumidor garantizan un balance climático óptimo.
Los tipos de leña más comunes para usar en el hogar son el haya, el abedul, el alerce, el abeto y el
pino. El criterio más importante para la combustión en una chimenea es que el combustible esté
suficientemente seco. Para ello, la leña debe almacenarse durante al menos dos años. El legislador
establece un contenido máximo de agua del 20%. Pero todavía hay mucha agua en los capilares de la
leña. Un fragmento de leña sólo será bueno si su contenido de agua es como máximo del 12 al 13%.
Las diferencias en el comportamiento de combustión son evidentes y evidentes también para los no
profesionales.
Los tipos de leña distintos de los mencionados anteriormente también son aptos para la combustión.
No obstante, en cada encendido debe comprobarse el efecto de la utilización en el comportamiento
de combustión. El roble, por ejemplo, se quema con una llama más corta y una llama más brillante. La
leña de roble es más difícil de quemar y, debido a la dureza de la leña, a menudo no se divide tan bien
(pequeño) como otros tipos de leña, lo que a su vez afecta negativamente al comportamiento de
combustión. Sin embargo, es una buena fuente de energía y, si se procesa correctamente, también es
una leña adecuada.
Siempre que sea posible, la leña blanda (abeto, pino, abeto), deben mezclarse con leña dura. La leña
blanda tiene una mayor proporción de tanino, lo que da lugar a más depósitos en la chimenea, las
tuberías de conexión y la chimenea. Si solo se quema leña blanda, el hollín brillante se puede formar
más rápidamente. La mezcla con leña dura (por ejemplo, haya) reduce este efecto.
Que la leña mida 25 cm, 33 cm o 50 cm determina el tamaño de la cámara de combustión de la
chimenea. Es mejor dejar secar los troncos de 50 cm un poco más (tres años o más), porque la leña se
seca principalmente por el escape de agua de los capilares, y esto simplemente lleva tiempo. Además,
la distancia entre el interior y el exterior de un tronco de 50 cm es el doble que la de un tronco de 25
cm. Es importante que la leña se parta "bien". Esto significa que la circunferencia de un tronco (una
vez medidos todos los lados alrededor del corte) no debe superar los 15-25 cm. La leña partida en este
tamaño se seca más fácilmente y, sobre todo, ofrece al fuego (la temperatura) más superficie para
atacar y, por tanto, facilita la salida de gases y, por tanto, la combustión. Además, se puede dosificar
mejor la cantidad de combustible. Gracias a su excelente eficacia, las chimeneas modernas sólo
necesitan una fracción de la cantidad de leña utilizada que en las estufas de antes. Los troncos más
pequeños pueden colocarse según las especificaciones del fabricante; los troncos más grandes suelen
superar la cantidad máxima especificada con un solo tronco.
No todo el mundo tiene en casa un medidor de humedad para determinar el contenido de agua en la
leña, y los aparatos buenos y fiables cuestan varios cientos de euros. No obstante, puedes evaluar bien
la idoneidad de tu combustible si observas con sensibilidad el comportamiento de la combustión. Un
"buen" fuego de leña sólo humea brevemente durante la fase de encendido, y después apenas lo
hace. Arde con una llama brillante (de amarillo a naranja) y larga. Hay pocos residuos en la cámara de
combustión, que suelen desaparecer una vez que el fuego está en pleno apogeo. Otro buen criterio
para evaluar si un tronco ya es apto para la combustión es el peso. La mayoría de los fabricantes
también definen la cantidad de soporte en kg/peso. Ejemplo: un tronco de haya de 33 cm de longitud
y 20 cm de circunferencia pesa aproximadamente 1 kg si está lo suficientemente seco para arder. En
una longitud de 25 cm, por tanto, pesa unos 750 gramos, y en una longitud de 50 cm, unos 1,5 kg.
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Instrucciones de funcionamiento hogar puerta guillotina
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