03.
MANTENIMIENTO RUTINARIO
Cómo mantener los frenos
Las nuevas zapatas y discos de freno presentan superficies
▪
relativamente lisas, por lo que el frenado mejorará cuando dichas
superficies estén rugosas después de recorrer 100 km o frenar en
bajadas largas de 3 a 5 veces.
Compruebe los tornillos entre la maneta de freno y el manillar, así
▪
como los tornillos entre las pinzas de freno y el cuadro o la
horquilla delantera:
1.
Cuando la distancia recorrida alcance los 200 km por primera vez,
compruebe que los tornillos mantienen las mismas prestaciones de
fijación.
2.
Después de los 200 km iniciales, compruebe el rendimiento de la
fijación una vez cada 500 km.
3.
Si circula a menudo en carreteras en malas condiciones, le
recomendamos que compruebe la capacidad de fijación de los
tornillos una vez cada 300 km.
El grado de desgaste de las zapatas de freno debe comprobarse
▪
después de haber circulado por carreteras normales durante 500
km, o 300 km si las condiciones de la carretera son complejas.
Las zapatas deben sustituirse rápidamente cuando dos tercios o
más estén desgastados.
Si se da cuenta de que los frenos están flojos pero el grado de
▪
desgaste de las zapatas de freno sigue siendo aceptable, y no
hay indicios de fugas de aceite en los frenos, póngase en
contacto con una tienda profesional y pida a los técnicos que
repongan el lubricante.
Si nota ruidos anormales evidentes durante la marcha, limpie el
▪
aceite de las zapatas y los discos de freno. Si el problema persiste,
póngase en contacto con un taller profesional y pida a los técnicos
que identifiquen el motivo del ruido anormal y le ofrezcan una
solución.
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Cómo usar la bici