5.4
Conexiones que tiene que preparar el cliente
Las lanzas distribuidoras de vapor, tipo DR73 y DL40 se pueden conectar
a calderas de vapor, convertidores de vapor o a suministros de vapor exis-
tentes. La sobrepresión de suministro (vapor a presión) debe ser lo más
constante posible y estar entre 0,2 y 4,0 bar. Las tuberías de suministro de
vapor y de condensado se han de instalar utilizando materiales adecuados.
Todas las empaquetaduras, materiales de juntas, conexiones roscadas y
material de aislamiento deben poder resistir temperaturas de hasta 152
°C, dependiendo de la presión. En el tubo de suministro de vapor se debe
instalar una válvula de corte.
La tubería de suministro de vapor al humidificador se ha de empalmar
siempre a la parte superior de una tubería de vapor principal o a un ge-
nerador de vapor con gran volumen de vapor. La instalación de las redes
de vapor y de condensado han de incorporar los avances técnicos más
recientes. Se ha de prestar atención para garantizar una purga completa
a plena producción, menor que la máxima capacidad y en reposo.
Las tuberías de alimentación de vapor, a instalar por el cliente, se de-
ben conectar a la unidad de conexión Esco. Dispuesta de forma óptima,
combina filtro, cámara separadora, válvula de regulación y manómetro
(opcional). Esta disposición garantiza vapor seco, no contaminado, en el
lado de entrada de la válvula de regulación, que así queda protegida de la
erosión. El condensado que se acumula en el tubo de suministro de vapor
y en la unidad de conexión, se purga de forma continua antes de llegar a
la válvula de regulación.
Todas las tuberías de condensado a instalar por el cliente se conectan
directamente a los drenajes de condensado y con una ligera pendiente
descendente (0,5-1 %), dirigidas a través de un sifón a un embudo o su-
midero de suelo. Una conexión de vapor, dos tuberías de condensado, y
el sencillo procedimiento de instalación, dan lugar a costes de instalación
mínimos con la máxima calidad del vapor de humidificación.
Para evitar problemas de drenaje producidos por un elevado volumen de
vapor o presión de la válvula de admisión, el condensado de los purgado-
res de condensado primario y secundario se debe purgar por separado.
Esto quiere decir que las dos tuberías de purga de condensado no
se deben unir antes del embudo.
Post-vaporización: Al final de la línea de condensados se puede producir
post-vaporización, esta puede ser reconocida por un chorro continuo de
vapor. La post-vaporización ocurre cuando la presión de condensados cae
a la presión ambiental y hay una gran diferencia de temperatura entre los
condensados y el ambiente. La post-vaporización es normal y no debería
confundirse con la pérdida de vapor causada por problemas en el drenaje
de condensados.
¡Precaución! En recintos cerrados, el vapor causado por la post-vaporiza-
ción puede crear efectos no deseados. En tales casos la post-vaporización
ha de suprimirse tomando medidas apropiadas (sifones, sección de en-
friamiento, etc.).
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