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SECTION 9: MATERIALES DE GRABADO
Materiales/técnicas de láser de fibra
Los láseres de fibra son capaces de grabar y marcar una amplia variedad de metales y plásticos. A
continuación, se enumeran algunas técnicas para crear diferentes marcados como el recocido, el
pulido y el grabado en metales, además encontrará información sobre el marcado sobre plástico con
el láser de fibra.
Recocido de metales
El recocido se puede llevar a cabo en la mayoría de metales que contienen altos niveles de óxidos
de metal y carbono. En general, estos son, entre otros, las aleaciones de acero, el hierro, el titanio, el
cobalto, el molibdeno y el acero/hierro cromado. Para recocer, debe usar una tasa de Potencia baja
y cambiar el color de la supe icie del material, pero con ayuda de un láser de fibra con una potencia
superior se podría reducir los tiempos de ciclo.
Si desea cambiar el color de la supe icie sin penetrar el metal, el punto focal del rayo láser es fundamental
para lograr un marcado oscuro. Conseguirá un marcado recocido con el punto focal alto (más cerca)
entre 1,778 y 2,794 mm o bajo (más lejos) entre -1,524 y -2,286 mm. Al ajustar la Potencia, el enfoque y la
frecuencia, variará el contraste del marcado, lo que suele dar como resultado tonos de azul, morado y
negro.
La frecuencia es la cantidad de potencia láser por pulso. Cuanto más baja sea la frecuencia, más
descarga de potencia se aplica. Debido a que, de manera intencional, aplicamos un rayo láser más
ancho para crear un marcado recocido, la frecuencia suele estar fijada en el rango inferior de 1-5 %.
Para obtener mejores resultados, imprima a 600 ppp. Debería considerar usar 1200 ppp en metales que
sean más complicados de recocer, si hay un cambio de color inconsistente en los ajustes recomendados
o si los tiempos de ciclo no son una preocupación. La superposición adicional de los píxeles que ofrece
emplear 1200 ppp garantizan una marca más profunda y oscura.
Grabado de metales
El grabado profundo de los metales es una aplicación habitual del láser de fibra. Usar una Potencia
baja no se equivale necesariamente a profundidad. Si se permanece más tiempo con el láser sobre el
metal se obtendrá como resultado una mayor erupción, lo que deja un marcado elevado en lugar de
una penetración profunda.
Hemos visto que lo mejor para grabar el metal en profundidad son los ajustes de Potencia moderadas
(20-30 %) y más pasadas para ir lentamente haciendo mella en el metal y dejando, por consiguiente, un
marcado de mayor calidad. El grabado profundo en los metales requiere una potencia máxima. Para
estos usos, se recomienda un láser de fibra de entre 30 y 50 vatios.
La frecuencia se suele establecer de manera general en el rango de 1-5 %. Las frecuencias más bajas
ofrecen más descargas de potencia del láser por pulso y son esenciales para la ablación del metal.
En nuestra experiencia, hemos visto que centrarse "en el metal" con entre 0,254 y 0,762 mm ayuda a
extraerlo. No hay datos técnicos disponibles sobre si sería útil volver a enfocar tras cada pasada. Para
fomentar la extracción limpia del metal, una mayor resolución (1200 ppp) con más superposición de
pulsos de láser suele ofrecer un grabado más definido y nítido.
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