¡NOTA!
Trabaje solamente con peines bien afilados, reemplace los peines desafila-
dos o defectuosos que no tengan dientes. Un afilado correcto de los peines
es solamente posible con máquinas especiales y por personal calificado.
Contacte en ese caso su servicio de mantenimiento.
6.2.4 Lubricación
Para conseguir un buen resultado de esquileo y para alargar la duración de
la esquiladora, es imprescindible aplicar una fina capa de aceite sobre las
cuchillas superior y inferior (Fig. 22).
¡PRECAUCIÓN!
Una lubricación insuficiente del peine implica un calentamiento y reduce
la longevidad del peine y de la esquiladora, así como de la batería. Por lo
tanto:
Lubrique los peines suficientemente durante el esquileo (como mínimo
X
cada 15 minutos), para que no marchen en seco (Fig. 22).
Utilice solamente lubricantes prescritos del productor.
X
¡NOTA!
Lubrique el cabezal esquiladora siempre con el aceite especial entregado
o con un aceite de parafina de la especificación ISO VG 15.
El aceite entregado está libre de clase tóxica y no produce irritaciones al-
gunas ni sobre la piel ni sobre las mucosas. Este aceite de parafina se
degrada aprox. un 20% después de 21 días (CEL-L-33-T-82).
Fig. 22
¡PRECAUCIÓN!
Quite el aceite sobrante, usado o saliente de todas las puntas de lubrica-
ción que están tratadas a mano. Eliminación de acuerdo con los reglamen-
tos válidos locales.
6.2.5 Limpieza
Para conseguir un buen resultado de esquileo y para alargar la duración de
la esquiladora, es imprescindible aplicar una fina capa de aceite sobre las
cuchillas superior y inferior (6.2.4 Lubricación).
Cabezal esquiladora y charnela
Limpie el cabezal esquiladora y la charnela antes de cada uso con el pincel.
Traducción del manual original / Esquiladora para animales pequeños
Es necesario lubricar los peines antes,
durante y después de cada uso. Si los
peines dejan rayas o se desaceleran,
es una señal segura que necesitan
aceite. Aplique algunas gotas de acei-
te de frente y lateralmente de los pei-
nes (flechas Fig. 22). Quite el aceite
sobrante por un pañuelo suave y seco.
Aerosoles lubricantes no contienen su-
ficientemente aceite para una buena lu-
bricación, pero son convenientes para
la refrigeración de los peines. Cambie
de inmediato peines dañados o denta-
dos a fin de evitar heridas.
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