Planeamiento del tratamiento: Hay 3 parámetros que deben ser considerados antes del
tratamiento para decidir sobre la profundidad de la exfoliación:
a. Tamaño de la punta a utilizar.
b. Intensidad de vacío.
c. Número de pasadas por zona.
Se recomienda comenzar con la punta más delicada y con poca presión de vacío.
Una vez planificados los parámetros que regulan la profundidad de exfoliación, proceda a regular
la intensidad de vacío. La presión de vacío controla la presión de la piel sobre las puntas de
diamantes. Las puntas de 50 y 75 micrones junto a una presión inicial bien baja, son
recomendados para comenzar, cambiando la punta y aumentando gradualmente el nivel de
vacío si se desea mayor exfoliación. Para lesiones en las que se procura un daño más profundo
se recomienda utilizar la punta de 100 micrones y mayor presión.
Si durante el tratamiento se cambia la punta por una de mayor diámetro de diamantes, se
recomienda disminuir la intensidad de vacío.
5.4. TRATAMIENTO
Deslice suavemente la punta sobre la piel a tratar. Se pueden realizar varias pasadas por la
misma región, dependiendo de la profundidad de exfoliación deseada. El resultado es una
exfoliación precisa, uniforme. Para el tratamiento de la cara se recomienda dividirla en 4
regiones:
FRENTE: pase la punta desde la ceja hacia el inicio del cuero cabelludo, en sentido
vertical. Luego pase en sentido horizontal. Repita hasta conseguir la exfoliación deseada.
REGIÓN MEDIA (nariz, mejillas y labio superior): comience desde afuera hacia adentro
con pasadas verticales y crúcelas con pasadas horizontales. Trabaje sobre la nariz de
manera vertical y sobre el labio superior en sentido horizontal. Para el tratamiento de las
líneas finas y arrugas haga pasadas verticales y crúcelas con pasadas horizontales. No
pase sobre el labio propiamente dicho.
BARBILLA (labio inferior y mandíbula): realice pasadas verticales desde el labio hacia el
mentón y luego cruce con pasadas horizontales.
PERIORBITARIA: suele ser la última región a tratar y se recomienda NO utilizar vacío,
solo deslice la punta sobre el contorno del ojo de manera suave. Nunca trate áreas dentro
de la cavidad ocular ni sobre el párpado superior.
En todos los casos, es mejor trabajar en la piel tirante. Use su mano libre para estirarla durante
las aplicaciones.
Para el tratamiento del cuello, utiliza la presión de vacío baja para evitar las huellas. Aplique
horizontalmente desde la parte central hacia los lados.
Para el tratamiento de pecho, se recomienda presión de vacío baja. Aplicar horizontal y
verticalmente.
Para el tratamiento posterior de las manos, aplique vertical y horizontalmente.
Finalmente, si hubiera áreas en cualquiera de las regiones, con cicatrices, arrugas,
hiperpigmentaciones, etc., se recomienda tratarlas al final de la exfoliación general y trabajar
cada una de estas áreas con la punta y la presión correspondiente.
INMANUUES198 Rev.2019.11.01 / ESP
MANUAL DE USUARIO – MINIVAC
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