Limpiar el frontal del aparato
Limpie el frontal de acero inoxidable úni-
camente con un paño húmedo y con un
detergente suave o con un producto no
abrasivo específico para acero inoxidable.
Para impedir que el aparato se ensucie de
nuevo rápidamente, p. ej. por huellas dacti-
lares, etc., después de la limpieza puede
emplear un producto para el mantenimiento
del acero inoxidable.
Daños de las superficies.
¡Los productos de limpieza que contienen
componentes de amoniaco, nitrodiluyen-
tes o diluyentes de material sintético pue-
den dañar la superficie!
No emplee ninguno de estos medios para
la limpieza.
Daños en el lavavajillas causados por
infiltración de agua.
No deberán emplearse, p. ej., mangueras
o dispositivos con agua a alta presión pa-
ra limpiar el lavavajillas o las áreas en las
inmediaciones del mismo.
Evite que entre agua en el lavavajillas du-
rante la limpieza.
Limpieza y mantenimiento
Limpieza de la cuba
La cuba se limpia por sí misma si se utiliza
siempre la cantidad correcta de detergente.
Si a pesar de ello se depositaran residuos p.
ej. de cal o de grasa, podrá eliminarlos con
un producto de limpieza especial (que po-
drá adquirir a través del Servicio Post-Venta
de Miele).
Limpieza de la junta de la puerta y
de la puerta
Limpie regularmente las juntas de la puer-
ta, incluidas aquellas debajo de la puerta,
con un paño húmedo a fin de eliminar los
restos de alimentos.
Limpie los restos de alimentos y de bebi-
das en los laterales de la puerta del lava-
vajillas y de las bisagras del mismo.
En el caso de los aparatos independientes
con panel de zócalo, elimine los restos de
alimentos y de bebidas de la canaleta que
hay por debajo de la puerta.
Riesgo de sufrir lesiones por cortes.
Existe el riesgo de sufrir lesiones por cor-
tes.
Al realizar la limpieza, preste atención a
los cantos afilados.
Estas superficies no pertenecen a la cuba.
Los chorros de agua no los alcanzan y no
pueden limpiarlos. Esto puede producir la
formación de moho.
75