Problemas
Las juntas de la puerta no son
estancas.
El aparato no enfría lo
suficiente.
Los alimentos están demasiado
calientes.
El compresor no se pone en
marcha de inmediato después
de cambiar el valor de la
temperatura.
Hay agua en el fondo del
aparato o sobre las rejillas.
Si los elementos de esta tabla no lo ayudan a resolver su problema específico, no intente reparar
el aparato usted mismo; póngase en contacto con el servicio posventa de la tienda donde haya
comprado el aparato.
IMPORTANTE: las reparaciones del aparato deben ser
realizadas exclusivamente por técnicos de mantenimiento
cualificados. Las reparaciones incorrectas pueden generar
peligros para los usuarios y no están cubiertas por la garantía.
Causas posibles
Las juntas de la puerta están
sucias.
Es posible que acabe de
invertir el sentido de apertura
de la puerta.
La temperatura no está bien
ajustada.
La puerta se ha quedado
abierta demasiado tiempo.
Se ha colocado una gran
cantidad de alimentos en el
aparato durante las últimas 24
horas.
El aparato se encuentra cerca
de una fuente de calor.
Esto es normal, no es un fallo.
El agujero de evacuación del
agua de descongelación está
obstruido.
Soluciones
Límpielas con agua y una
esponja suave.
Caliente con cuidado las
partes de las juntas que
gotean con un secador
de pelo (con aire frío). Al
mismo tiempo, corrija con
la mano la posición de las
juntas.
Consulte el apartado
«Ajuste de la
temperatura».
No abra la puerta más
tiempo del necesario.
Ajuste temporalmente
el termostato a una
temperatura más fría.
Evite sobrecargar el
interior del frigorífico.
Consulte el apartado
«Lugar de instalación».
El compresor se pondrá
en marcha en poco
tiempo.
Consulte el apartado
«Limpieza y
mantenimiento».
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