No coja el teléfono con las manos mojadas mientras se está cargando.
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Podría sufrir una descarga eléctrica y dañar gravemente el teléfono.
No cargue el teléfono cerca de material inflamable ya que podría
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calentarse y provocar un incendio.
Utilice un paño seco para limpiar el exterior de la unidad (no utilice
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disolventes como benceno, diluyentes o alcohol).
No cargue el teléfono sobre superficies acolchadas.
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El teléfono se debe cargar en una zona con la ventilación adecuada.
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No exponga esta unidad a humo o polvo excesivo.
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No coloque el teléfono cerca de tarjetas de crédito o billetes de
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transporte, podría afectar a la información de las bandas magnéticas.
No golpee la pantalla con un objeto punzante, ya que puede estropear
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el teléfono.
No exponga el teléfono a líquidos ni humedad.
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Utilice con cuidado los accesorios (por ejemplo, los auriculares). No
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toque la antena si no es necesario.
No utilice, toque ni intente retirar ni reparar el cristal agrietado si está
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astillado o presenta esquirlas. La garantía no cubre los daños en la
pantalla causados por el uso incorrecto del dispositivo.
El teléfono es un dispositivo electrónico que genera calor en modo
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normal de funcionamiento. Si se ha utilizado de forma prolongada,
el contacto directo con la piel sin la ventilación adecuada puede ser
molesto o provocar quemaduras. Tenga cuidado cuando manipule el
teléfono durante su funcionamiento o después de éste.
Si el teléfono se moja, desenchúfelo inmediatamente y déjelo secar
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por completo. No intente acelerar el proceso de secado con una
fuente de calor externa, como un horno, un microondas o un secador
de pelo.
Si el teléfono resulta mojado, una etiqueta en el interior cambiará
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de color. La garantía no cubre los daños producidos en su dispositivo
como consecuencia de la exposición a líquidos.
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