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7. Inspecciones, mantenimiento y servicio técnico
Se recomienda vaciar el cazo completamente justo después de usarlo. Para su almacenamiento, no deje el
cazo directamente en el suelo, en su lugar, deposítelo sobre tacos de madera o un palé, por ejemplo. Deje el
implemento en una posición en la que el agua no pueda acumularse en el mismo.
Para limpiar el cazo puede utilizar una hidrolavadora y detergente suave. No aplique solventes potentes ni
dirija la pistola de presión directamente sobre las etiquetas fijadas al implemento. Antes de un
almacenamiento prolongado, retoque la pintura donde sea necesario para evitar la corrosión.
7.1 Inspección de estructuras metálicas
Las estructuras metálicas del implemento también deben inspeccionarse con regularidad. Compruebe
visualmente la presencia de daños e inspeccione los soportes de acople rápido y la zona circundante con
detenimiento. No utilice el implemento si observa signos de deformación, grietas o rotura.
Solo están permitidas las reparaciones con soldadura realizadas por soldadores profesionales. Cuando se
realice una soldadura, únicamente deben emplearse los métodos y aditivos adecuados para el acero usado
en el cazo. Para más información sobre reparaciones, póngase en contacto con el servicio técnico más
cercano.
8. Condiciones de la garantía
Avant Tecno Oy ofrece una garantía de un año (12 meses) a partir de la fecha de compra para el implemento
que fabrica.
La garantía cubre los siguientes costes de reparación:
Los costes de mano de obra estarán cubiertos cuando la reparación no se realice en la fábrica.
La fábrica sustituya cualquier componente o consumible defectuoso.
La fábrica podría reembolsar el precio de los componentes que el cliente haya adquirido en casos especiales
acordados por anticipado.
La garantía no cubre:
El mantenimiento habitual y las piezas y consumibles necesarios para ello.
Los daños causados por condiciones de trabajo o modos de uso inusuales, negligencia, cambios
estructurales realizados sin el consentimiento de Avant Tecno Oy, el uso de piezas no originales o la falta
de mantenimiento.
Las consecuencias de una avería, como por ejemplo, la interrupción del trabajo u otros posibles daños
adicionales.
Los gastos de transporte y/o traslado asociados a la reparación.
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