Mantenimiento de llantas de aluminio
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El aluminio se deteriora por la sal y otras partículas contaminantes que se encuentran en la
carretera. Cuando sea necesario, lo antes posible, utilice una esponja y detergente suave
para limpiar estas partículas contaminantes. No use productos químicos agresivos (incluidos
algunos limpiadores de llantas de venta comercial) ni un cepillo duro. Estos pueden dañar el
acabado protector de las llantas de aleación de aluminio causando su corrosión.
Dependiendo del tipo de acabado, las ruedas también pueden perder su brillo o parecer
bruñidas. Para evitar manchas de agua, limpie las ruedas en seco con un trapo mientras
estén todavía húmedas.
Cristales de luces exteriores empañados
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Los cristales interiores de las luces exteriores (faros, luces de freno, etc.) pueden empañarse
temporalmente si conduce con lluvia o después de lavar el vehículo. También puede formarse
condensación dentro de los cristales cuando hay una diferencia significativa entre la
temperatura ambiente y la del interior del cristal (similar a cuando se empañan las ventanillas
del vehículo con lluvia). Estas condiciones son procesos naturales, no problemas estructurales
de diseño de las luces exteriores.
Las características de diseño de los cristales pueden provocar la formación de humedad en las
superficies de la estructura de los cristales de las luces. No se trata tampoco de una anomalía.
Sin embargo, si observa una gran acumulación de agua o grandes gotas de agua formándose
dentro de los cristales, haga que revisen el vehículo en un concesionario.
uuLimpiezauCuidado del exterior
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