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INSTRUCCIONES DE USO DEL MANDO A DISTANCIA
El mando a distancia está conectado a la centralita mediante un cable espiralado extensible.
Teclas del mando a distancia:
1. tecla UP para la elevación
2. tecla DOWN para el descenso
Señales del mando a distancia:
3. led de indicación de sobrecarga: el elevador tiene un dispositivo
4. led de indicación del nivel de carga de la batería
13. ADVERTENCIAS
•
El elevador es un dispositivo que permite efectuar breves desplazamientos de un paciente
con dificultades motoras, por ejemplo de una cama a una silla de ruedas o a una silla
cómoda, y viceversa. El elevador no se debe utilizar para transportar al paciente.
•
Antes de levantar al paciente, asegurarse de que las patas de la base estén lo más
abiertas posible, la palanca de mando esté firmemente bloqueada en la posición
correspondiente, y los frenos de las ruedas traseras estén accionados.
•
Durante el desplazamiento, evitar superar obstáculos que puedan provocar un vuelco.
•
El uso de los elevadores descritos en este manual, en combinación con las eslingas
Moretti previstas entre los accesorios, permite coger y levantar del suelo al paciente.
¡ATENCIÓN!
Verificar siempre el buen estado de las eslingas. No utilizar eslingas que presenten
signos de daño o de desgaste.
14. LIMPIEZA
Para limpiar las eslingas y la estructura, utilizar una solución de alcohol y jabón neutro en
partes iguales mezclados con agua.
15. MANTENIMIENTO
•
Es extremadamente importante que el elevador sea controlado antes de cada uso:
•
En especial, verifique que todos los tornillos y pernos estén bien apretados
•
Comprobar que el elevador se pueda mover libremente con los frenos de las ruedas no activos
•
Verificar el estado de los frenos de las ruedas traseras para un correcto funcionamiento
•
Es muy importante comprobar periódicamente que los pernos de conexión y las juntas
de retén estén colocados correctamente (los pernos conectan el actuador arriba y abajo
del elevador y el balancín donde se engancha la eslinga)
•
Las partes mecánicas deben ser lubricadas con una gota de aceite para favorecer
el deslizamiento y la resistencia al desgaste. En particular, prestar atención al dispositivo
mecánico de separación de las patas del verticalizador. Lubricar como se indica más
arriba, cada dos o tres meses
de control de la sobrecarga que interrumpe el movimiento cuando
se supera el umbral de carga y genera una señal visual y acústica
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