PUESTA BAJO PRESIÓN DE LA INSTALACIÓN – PRUEBA A LA MÁXIMA PRESIÓN
Terminadas las operaciones de rellenado de los circuitos, realice (mediante el sistema de carga suministrado con el calentador) la
presurización de la centralita/colector y de los circuitos alimentados por ella.
Rellenado. Prueba preliminar.
Saque el aire de cada uno de los circuitos, rellenando y lleve la presión a un valor igual a dos veces la presión de ejercicio con un
mínimo de 6 bar, compruebe el estado de retención después de 2 horas; mantener en 6 bar durante 22 horas más. Durante esta
operación, las válvulas de interceptación (1) deberán estar cerradas para evitar la intervención de la válvula de seguridad montada en
el calentador.
El aumento de la presión se deberá efectuar mediante el auxilio de una bomba de carga manual (Fig. 2) u otro sistema a disposición,
conectada con el racor de manguera (5) o (6). Compruebe el valor de la presión mediante la lectura del manómetro (Fig. 4).
N.B. La presión máxima nunca deberá superar la presión máxima indicada por el fabricante que los componentes pueden soportar.
Prueba definitiva. Predisposición a la presión posterior a la prueba.
Después de la prueba preliminar (24 horas), verifique el posible descenso de presión que normalmente está causado por la dilatación
fisiológica de las tuberías, o por variaciones de la temperatura ambiente, etc. Y después, vuelva a llevar la presión a los valores que
se indican en la prueba preliminar y manténgala durante otras 24 horas. Ahora, el descenso de presión deberá estar contenido en 0,3
bar.
Una vez terminada la prueba vuelva a llevar la presión a los valores de ejercicio de la instalación y manténgala hasta terminar el
secado de la solera, que ahora se puede extender.
Nota: Una vez terminada la prueba se recomienda rellenar la hoja que certifica la realización de la prueba bajo presión de las
instalaciones con resultado positivo y entregarla al comitente.
Puesta en seguridad de las instalaciones.
Se recomienda instalar todos aquellos componentes (vasos de expansión, válvulas de descarga por exceso de presión, etc.) que
sirvan para prevenir la posibilidad de aumentos anómalos de presión en el circuito cerrado, con el consecuente daño de los
componentes.
Los aumentos debidos a fenómenos ambientales como las variaciones de temperatura a lo largo de la jornada, o las variaciones de
temperatura por la estación, o los procesos de secado de las soleras, pueden modificar notablemente la temperatura y por tanto, el
volumen de los fluidos contenidos. Y todo en mayor o menor medida, también en función de la dimensión y por tanto, del volumen
total de fluido contenido en la instalación. Indique en la hoja de prueba de la instalación los componentes antes mencionados.
Nota: En la estación invernal, si hubiera que afrontar climas muy rígidos con peligro de congelación, se recomienda proceder con la
adición de anticongelantes de fluidos que, a continuación, tendrán que eliminarse con lavados; o bien, vaciar completamente con aire
a presión o si no, evaluar si testar la instalación poniéndola bajo presión con aire.
Para la introducción de aditivos anticongelantes y para las prescripciones específicas inherentes a los circuitos de la
instalación, consulte las fichas técnicas del fabricante. El uso incorrecto podría causar daños graves al sistema.
En el caso de que la puesta bajo presión se realice con aire comprimido, es necesario que el correspondiente tapón de
sellado (11) esté cerrado. Si no fuera así, la válvula de escape permitiría la salida constante del aire inyectado.
Fig. 1
Instrucciones del producto IP2028.0-ES_01
(véase también la norma UNI-EN 1264-4:2003)
1
Fig. 2
Fig. 3
RBM
11
6
5
Racor para la conexión del manómetro:
Utilice un manómetro de Ø
40 con racor radial G1/8" de
16 bar cód. 7469.005 para la
conexión
terminales
manuales/automáticos y al
grupo by-pass.
Fig. 4
a
los
grupos
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