• NO utilice el audífono si padece una otitis media o sufre una inflamación del conducto audi-
tivo.
• Si siente dolor o malestar mientras utiliza el audífono, deje de usarlo y consulte a su médico.
• Si se le inflama el oído, se le irrita la piel o aumenta el cerumen mientras lleva el audífono,
deje de usarlo y consulte a su médico.
• Deje de utilizar el audífono y consulte a un médico en los siguientes casos:
- Erupción o eccemas en zonas de la piel en contacto con el audífono. (El audífono está fa-
bricado con un material que no irrita la piel. Sin embargo, en raras ocasiones pueden pro-
ducirse reacciones alérgicas que se manifestarán posiblemente en forma de eccemas).
- El uso del audífono hace que secrete el oído o hace necesario el tratamiento del mismo.
- La capacidad auditiva disminuye considerablemente de forma repentina.
• Si se quedan piezas del audífono en el oído, acuda inmediatamente a un médico. No intente
extraer las piezas usted mismo.
• Ajuste el volumen primero en un nivel bajo y auméntelo progresivamente cuando se haya
acostumbrado al audífono.
• NO ajuste el botón del volumen demasiado alto, ya que esto puede dañar a largo plazo la
capacidad auditiva.
• NO preste su audífono a otras personas ni utilice el de otras personas. Existe riesgo de sufrir
pérdida auditiva y de contraer infecciones.
• NO dé su audífono a otras personas para que lo utilicen. La utilización de un audífono fabri-
cado para otra persona puede causar daños auditivos.
• El audífono NO se puede utilizar en niños menores de 36 meses.
• Los problemas auditivos son especialmente difíciles de diagnosticar en niños. Solo un otorri-
nolaringólogo debería prescribir un audífono a un niño tras someterlo a un examen exhausti-
vo.
• Mantenga el audífono, los accesorios y las baterías lejos del alcance de los niños; existe pe-
ligro de lesiones y de atragantamiento.
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