Comprobar y limpiar el ventilador del radiador.
Cuando utilice aire comprimido, use los dispositivos de protección como las gafas para
proteger sus ojos. Cuando utilice aire comprimido, utilice dispositivos de protección, como
gafas, para proteger sus ojos. El polvo o la suciedad en suspensión pueden dañar sus ojos.
Los residuos y el polvo que se adhieren al núcleo del radiador reducen el rendimiento de
enfriamiento y pueden causar sobrecalentamiento. Se debe realizar una inspección diaria
de los ventiladores del núcleo del radiador (limpiar si es necesario). Utilice aire comprimido
[196 kPa (2 kgf/cm²) o menos] para eliminar la suciedad y el polvo de alrededor del núcleo
del radiador. Si persiste la suciedad, enjuague a fondo con detergente y agua del grifo.
Nunca utilice agua o aire a alta presión cerca del núcleo del radiador ni intente limpiarlo con
un cepillo. De lo contrario, podría dañar el núcleo del radiador.
Precauciones para el almacenamiento a largo plazo
Para almacenar el motor durante un periodo largo de tiempo, tenga en cuenta las siguientes
consideraciones:
1. Inspección regular.
Antes de almacenar el vehículo, lleve a cabo las revisiones que correspondan según el
programa de mantenimiento.
2. Drenaje del agua de refrigeración
Si no ha añadido anticongelante al agua de refrigeración, drene el agua de refrigeración
del motor.
Tenga mucho cuidado ya que podría quemarse. El agua puede alcanzar temperaturas
muy elevadas. Antes de drenar el agua, asegúrese de que la temperatura haya
descendido.
• Desenrosque la tapa del radiador
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