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6.1.2 Determinación del umbral por vía ósea sin enmascaramiento
Mediante esta prueba, se establecen los mínimos niveles audibles por el pacien-
te para vía ósea para cada frecuencia. Estos niveles corresponden entonces a las
pérdidas auditivas del oído interno.
Realización de la prueba
La prueba se realiza en forma similar a lo descrito en el punto 6.1.1, pero en este
caso los tonos son enviados al paciente por vía ósea, utilizándose para ello el vi-
brador óseo suministrado con el equipo. De esta forma el sonido se propaga por
los huesos del cráneo hasta llegar directamente al oído interno, pudiendo estu-
diarse los umbrales sin tener en cuenta la transmisión por el oído externo y me-
dio.
En este caso, la única diferencia en el manejo de los controles del equipo con
respecto a la determinación de umbrales por vía aérea es que el selector de vía o
conducción del estímulo (1) deberá estar colocado en la posición "Ósea (VO)".
A pesar de la similitud de esta prueba con la de V.A., es importante tener en
cuenta las siguientes consideraciones:
En esta prueba la ubicación del transductor óseo es decisiva. Generalmente
éste es ubicado en el área del hueso mastoides, evitando el contacto con el
pabellón auditivo. Deberá encontrarse el punto de mayor audibilidad, dando
instrucciones al paciente para que él mismo mueva el vibrador óseo hasta en-
contrar la ubicación óptima, mientras que el examinador envía tonos de prue-
ba. El nivel de estos tonos de prueba deberá ser ligeramente superior a los
umbrales por vía aérea.
Los umbrales obtenidos por vía ósea no son tan precisos como los obtenidos
por vía aérea, y esto se debe, principalmente a que la vinculación del vibrador
con el cráneo a veces no puede lograrse muy exitosamente.
El oído opuesto al que está siendo investigado, debe quedar libre, sin auricular,
debido que el efecto de oclusión que pueda crearse puede alterar los resulta-
dos de la prueba.
En pacientes con umbrales normales por vía aérea, deberán obtenerse tam-
bién umbrales normales por vía ósea. Teóricamente, es imposible que haya
mayores pérdidas por V.O. que por V.A.; sin embargo, en algunos casos de pa-
cientes de edad avanzada, puede darse el caso de encontrar umbrales peores
por V.O. para frecuencias inferiores a 1000 Hz. Otros casos similares son posi-
bles cuando el contacto del vibrador óseo con el cráneo no es bueno.
Cuando se estimula un oído por vía ósea, se produce una transmisión del soni-
do a través de los huesos del cráneo, y por lo tanto también se está estimulan-
do al otro oído, aunque con menor nivel debido a pérdidas en la propagación.
Estas pérdidas definen la llamada atenuación cruzada, que para la vía ósea es-
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