Limitaciones de uso
El Magus es una aeronave deportiva ligera en la categoría de parapente con un peso en
vacío inferior a 120 kilos.
El Magus ha sido probado por el laboratorio de homologación de la DHV como vela de
categoría LTF/EN D. El Magus está homologado como vela monoplaza. El Magus ha sido
sometido a pruebas de carga e impacto, y las ha superado con una carga correspondiente
a 8G del peso máximo en vuelo. Sus pruebas en vuelo han mostrado que la vela se
mantiene estable y controlable en un amplio margen de condiciones de vuelo normales y
anormales. En cualquier caso, las turbulencias y los vientos racheados pueden conducir a
una plegada parcial o completa de la vela. Por lo tanto, nunca vueles en ese tipo de
condiciones.
El Magus no debe usarse fuera de su rango homologado de pesos.
El Magus no debe usarse si está lloviendo o nevando.
El Magus no debe usarse con viento fuerte o racheado.
El Magus no debe volarse en nubes o con niebla.
El Magus no debe ser usado por pilotos que carezcan de conocimientos o experiencia
suficientes.
El Magus no debe usarse para acrobacia ni vuelo extremo o maniobras de vuelo cuyo
ángulo exceda los 90º
El Magus no debe usarse si la vela está mojada.
El Magus ha sido homologado para un rango de pesos definido. Recomendamos
encarecidamente que respetes esos rangos de peso.
Si quieres más velocidad, un
mando preciso y en volar en general en condiciones fuertes o en competición, deberías
elegir la talla en la que te encuentres en la mitad o la parte superior del rango de pesos.
Recuerda que siempre puedes agregar lastre cuando las condiciones son más fuertes.
La norma EN 926-2:2013 describe el peso que se mide así: "Todos los pesos tienen una
tolerancia aceptable de ± 2 kilos. Por lo tanto, sobrecargar ligeramente la vela quedaría
dentro de las tolerancias EN. Sin embargo, volar por encima del peso máximo del rango
aumenta el comportamiento dinámico de la vela.
Antes de la entrega, así como durante la fabricación, cada parapente pasa por una estricta
inspección visual y es probado en vuelo por tu distribuidor. Los sellos en su etiqueta, junto
a un certificado completo de prueba en vuelo, confirman esto. Comprueba que el
parapente se haya probado en vuelo antes de tu primer despegue. Si no lo ha sido,
consulta a tu distribuidor.
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