• Asegúrese de que tiene los pies apoyados en el suelo.
• Cuando esté sentado, asegúrese de apoyar el peso de las piernas sobre los
pies y no sobre la parte frontal del asiento. Ajuste la altura del asiento o, si es
necesario, utilice un reposapiés para mantener una postura adecuada.
• Varíe de actividad en el trabajo. Pruebe a organizarse el trabajo de forma que
no tenga que estar sentado trabajando durante largos periodos de tiempo.
Pruebe a ponerse de pie y caminar un poco regularmente.
• Mantenga la parte inferior de su escritorio libre de obstáculos y cables que
puedan interferir en su comodidad o bien suponer un riesgo de tropiezo.
Muñecas
relajadas y
apoyadas
│
48
Acerca del monitor
Pantalla del monitor
a la altura de los
ojos o por debajo
Monitor y
teclado justo
delante del
usuario
Pies apoyados
en el suelo