Guía clínica: Tatuajes oscuros y lesiones pigmentadas (Q-Switched Nd:YAG)
G.5.5. Anestesia tópica
G.5.6. Fotografía
G.5.7. Posibles efectos
secundarios del
tratamiento
G.5.7.1. Molestias
G.5.7.2. Daños a la textura
natural de la piel
G.5.7.3. Púrpura y petequia
G-6
En general, los tratamientos de la piel realizados con los módulos de M22,
se pueden administrar sin anestesia tópica. No obstante, dado que los
tratamientos de la piel suelen comprender grandes superficies, como el
rostro completo, muchos pacientes prefieren someterse al tratamiento
con una anestesia tópica que elimine las molestias del procedimiento.
El uso de anestesias tópicas debe respetar siempre las instrucciones
del fabricante.
Las anestesias tópicas se suelen aplicar alrededor de una hora antes del
tratamiento. Asegúrese de eliminar completamente toda la anestesia tópica
antes del tratamiento.
Advertencia
El uso de grandes cantidades de anestesia tópica en zonas
extensas puede tener efectos secundarios no deseados.
Es recomendable tomar fotografías antes y después del tratamiento para
documentar su avance. Dado que muchos pacientes no consiguen evaluar
objetivamente el progreso del tratamiento, estas fotografías ofrecen
pruebas concretas.
Se deben emplear condiciones estándar de luz, velocidad, flash y enfoque
similares fotografiar a los pacientes. De este modo, es posible comparar
de forma objetiva las fotos tomadas en distintas ocasiones.
Los siguientes efectos secundarios pueden aparecer tras la eliminación
de tatuajes oscuros o el tratamiento de lesiones pigmentadas:
Al emitir un pulso, éste puede producir molestias de distinto grado.
Algunas personas sienten una sensación de ardor en la piel y otras un dolor
sordo. Las sensaciones de ardor y el dolor pueden durar 10 minutos o se
pueden prolongar varias horas tras el tratamiento. En algunos casos puede
ser necesario el uso de un anestésico tópico.
La piel puede lesionarse como consecuencia del tratamiento; es posible que
se forme una costra o ampolla que tardará entre 5 y 10 días en curar. No se
debe aplicar maquillaje sobre el área tratada hasta que no se haya curado la
lesión. La piel debe mantenerse hidratada con productos emolientes.
El tratamiento puede provocar un hematoma azul-violáceo en la zona
tratada, que puede durar entre 5 y 15 días. A medida que la púrpura
o petequia desaparezca, es posible que se produzca una coloración marrón
óxido de la piel afectada, que suele tardar entre 1 y 3 meses en desaparecer.
®
™
Lumenis
M22
UM-1024721ES-H Rev A