434 Llantas y neumáticos
Compare la presión de los neumáticos con la
#
presión recomendada para el estado de ser‐
vicio actual (
página 432). Para ello, tenga
→
en cuenta las indicaciones sobre la tempera‐
tura de los neumáticos (
→
%
Los valores mostrados en el visualizador
multifunción pueden diferir de los indicados
por el comprobador de la presión de inflado
de los neumáticos, ya que toman como base
el nivel del mar. En lugares situados a mucha
altura, los manómetros indican una presión
de los neumáticos mayor a la indicada en el
ordenador de a bordo. En ese caso, no
reduzca la presión de los neumáticos.
Tenga en cuenta también los siguientes temas
complementarios:
Indicaciones sobre la presión de los neumáti‐
R
cos (
página 431)
→
Reinicio del control de la presión de los neu‐
máticos
Requisitos
La presión de inflado recomendada debe
R
estar correctamente ajustada en los cuatro
neumáticos para el estado de servicio res‐
pectivo (
Reinicie el control de la presión de los neumáti‐
cos en las siguientes situaciones:
página 431).
si ha modificado la presión de inflado
R
si ha montado llantas o neumáticos nuevos o
R
los ha cambiado
Ordenador de a bordo:
Servicio
,
Deslice el dedo hacia abajo sobre la parte
#
izquierda del Touch Control del volante.
En el visualizador multifunción se muestra el
aviso
nuevos valores indicativos
Confirme la reinicialización pulsando a.
#
En el visualizador multifunción se muestra el
aviso
máticos reiniciada
Los mensajes de aviso actuales se borran y
el testigo luminoso de advertencia amarillo
h se apaga.
página 431).
→
Neumáticos
.
Adoptar las presiones actuales como
.
Supervisión de presión de inflado neu-
.
Al cabo de unos minutos de marcha, el sis‐
tema confirma que los valores de presión de
inflado de los neumáticos actuales se
encuentran dentro del margen prescrito. A
continuación se adoptan y se supervisan los
valores de presión de inflado actuales de los
neumáticos como nuevos valores de referen‐
cia.
Tenga en cuenta también los siguientes temas
complementarios:
Indicaciones sobre la presión de los neumáti‐
R
cos (
página 431)
→