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Conducción y manejo
Por debajo de una velocidad de
30 km/h, la frenada automática de
emergencia puede reducir la veloci‐
dad del vehículo a parada completa.
Si la velocidad supera 30 km/h, la
frenada automática de emergencia
reduce la velocidad. Sin embargo, el
conductor debe pisar el freno para
detener el vehículo por completo.
Cambio automático: Si el vehículo se
detiene por completo, se mantiene la
frenada automática durante un
periodo determinado. Mantenga
pisado el pedal de freno para impedir
que el vehículo se ponga en marcha.
Cambio manual: Si el vehículo se
detiene por completo, el motor puede
calarse.
El control de velocidad se desactiva
ante un frenado automático de emer‐
gencia.
9 Advertencia
No confíe en el sistema para
frenar el vehículo. El frenado auto‐
mático de emergencia no frenará
fuera de su intervalo de velocidad
operativa y solo responde a vehí‐
culos y peatones detectados.
Asistente de frenada inteligente
Si el conductor frena, pero no lo sufi‐
ciente para evitar una colisión, este
sistema complementará la frenada.
Esta ayuda se proporciona única‐
mente se si el conductor pisa el pedal
de freno.
El asistente de frenada inteligente se
desactivará automáticamente al
soltar el pedal de freno.
Alerta de colisión frontal 3 159.
Protección del peatón de parte delan‐
tera 3 163.
Limitaciones del sistema
En algunas ocasiones, el sistema de
frenada de emergencia activa puede
proporcionar una frenada automática
en situaciones que parecen innece‐
sarias; por ejemplo, en garajes, a
causa de distintos tipos de objectos,
como señales de tráfico o a vehículos
en otro carril. Pise firmemente el
pedal del acelerador para sobrepasar
la frenada automática si la situación y
el entorno lo permiten.
En los siguientes casos, el rendi‐
miento de la frenada de emergencia
activa podría estar limitado:
● conducción en carreteras sinuo‐
sas o de montaña
● detección de vehículos con
remolque, tractores, vehículos
con barro, etc.
● detección de un vehículo cuando
la climatología limita la visibili‐
dad, como con niebla, lluvia o
nieve
● conducción durante la noche
● el sensor del parabrisas o la
unidad de radar detrás del para‐
choques delantero están
bloqueados con nieve, hielo,
aguanieve, barro, suciedad u
objetos extraños, como por ejem‐
plo, adhesivos
● el parabrisas está dañado
● el parachoques está dañado o se
ha visto afectado por objetos
extraños, por ejemplo, el soporte
de la placa de matrícula