Nota relativa al medio ambiente
Lave el vehículo sólo en los lugares previstos para este fin, para evitar que
llegue al alcantarillado agua sucia que pueda estar contaminada con aceite,
grasa o combustible. En algunos lugares está incluso prohibido lavar el vehí-
culo fuera de los lugares previstos para este fin.
Priorice los productos respetuosos con el medio ambiente.
Los restos de productos de conservación no deben tirarse a la basura
doméstica. Tenga en cuenta las indicaciones del fabricante.
Lavado del vehículo
Cuanto más tiempo permanezcan sobre la carrocería los restos de insectos,
excrementos de pájaros, resinas de árboles, polvos industriales y de la calle,
manchas de alquitrán, partículas de hollín, sales antihielo y otro tipo de
suciedad agresiva, tanto más persistentes serán sus efectos destructivos.
Las altas temperaturas debidas, por ejemplo, a una radiación solar intensa,
refuerzan el efecto cáustico. Los bajos del vehículo también se deberán lavar
a fondo regularmente.
Túnel de lavado
Tenga en cuenta las indicaciones del cartel de la propia instalación de
lavado. Tome las precauciones habituales antes del lavado automático
(cerrar todas las ventanas, plegar los espejos retrovisores) para evitar daños.
Si se ha montado componentes especiales en el vehículo (espóiler, baca,
antena,...), hable previamente con el encargado del túnel de lavado
La capa de pintura del vehículo es tan resistente que, normalmente, el vehí-
culo puede lavarse sin ningún tipo de problemas en los túneles de lavado
automáticos. Sin embargo, el desgaste real al que se somete la pintura
depende del tipo de túnel de lavado. SEAT recomienda los túneles de lavado
sin cepillos.
Seguridad ante todo
Instrucciones de Manejo
Para eliminar los posibles restos de cera existentes en los cristales y prevenir
que rasquen las escobillas limpiacristales, ténganse en cuenta las siguientes
indicaciones
página 251, "Limpieza de ventanillas y retrovisores exte-
riores".
Lavado a mano del vehículo
Si lava a mano el vehículo, ablande primero la suciedad con agua abundante
y elimínela en lo posible aclarando con agua.
A continuación hay que limpiar el vehículo con una esponja blanda, un
guante de lavado o un cepillo de lavado, ejerciendo poca presión. Para ello,
comience por el techo y trabaje de arriba a abajo. Sólo en el caso de que la
suciedad no pueda eliminarse con agua, utilice champú.
Enjuague la esponja o el guante con frecuencia.
Las partes más sucias, como ruedas, apoyapiés, etc. deberán limpiarse en
último lugar. Utilice otra esponja para ello.
¡ATENCIÓN!
Las piezas cortantes del vehículo podrían provocar lesiones.
Protéjase las manos y los brazos de cantos afilados, por ejemplo, al
limpiar los bajos del vehículo o la parte interior de los pasos de rueda.
¡ATENCIÓN!
Después del lavado, debido a la humedad (y al hielo en invierno) en los
frenos, el efecto del frenado será menor, incrementándose la distancia de
.
frenado.
"Séquelos y elimine el hielo" frenando con precaución. Hágalo sin
poner en peligro a otros usuarios de la vía ni incumplir las normas de
tráfico.
Consejos prácticos
Conservación y limpieza
Datos Técnicos
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