Accidentes frontales y las leyes físicas
El conductor que no lleve puesto el cintu-
Fig. 11
rón de seguridad se verá lanzado hacia delante.
El ocupante del asiento trasero que no lle-
Fig. 12
ve puesto el cinturón de seguridad se verá lanzado
hacia delante sobre el conductor que sí lleva el
cinturón.
Es fácil explicar de qué modo actúan las le-
yes físicas en caso de accidente frontal: en
cuanto un vehículo se pone en movimiento
se origina, tanto en el vehículo como en los
22
Seguridad
ocupantes del mismo, una energía denomi-
nada "energía cinética".
La magnitud de la "energía cinética" depen-
de fundamentalmente de la velocidad, del
peso del vehículo y de los ocupantes. Cuan-
to mayor sean mayor será la energía que de-
berá ser "absorbida" en caso de accidente.
No obstante, el factor más importante es la
velocidad del vehículo. Por ejemplo, si la ve-
locidad se duplica pasando de 25 km/h
(15 mph) a 50 km/h (30 mph), la energía ci-
nética correspondiente se cuadruplica.
Dado que los ocupantes del vehículo de
nuestro ejemplo no llevan abrochado el cin-
turón de seguridad, en caso de colisión toda
la energía cinética de los ocupantes sólo se-
rá absorbida por dicho impacto.
Aun circulando a una velocidad comprendi-
da entre 30 km/h (19 mph) y 50 km/h
(30 mph), las fuerzas que actúan sobre el
cuerpo en caso de accidente pueden supe-
rar con facilidad una tonelada (1.000 kg). Las
fuerzas que actúan sobre su cuerpo aumen-
tan cuanto mayor sea la velocidad a la que
circule.
Los ocupantes del vehículo que no se hayan
abrochado los cinturones de seguridad no
están "unidos" al vehículo. En caso de coli-
sión frontal, estas personas se desplazarán
con la misma velocidad a la que circulaba el
vehículo antes de la colisión. Este ejemplo es
válido no sólo para colisiones frontales, sino
también para todo tipo de accidentes.
Incluso circulando a poca velocidad, en caso
de colisión actúan sobre el cuerpo fuerzas
que no se pueden contrarrestar sólo con
apoyarse en las manos. En caso de colisión
frontal, los ocupantes del vehículo que no
lleven puesto del cinturón de seguridad se
verán lanzados de forma incontrolada hacia
delante y se golpearán, por ejemplo, contra
el volante, el tablero de instrumentos o el
›››
parabrisas
fig.
11.
También es imprescindible que los ocupan-
tes de los asientos traseros se abrochen el
cinturón, ya que, en caso de accidente, se
verían desplazados de un modo incontrola-
do por el habitáculo. Si un ocupante del
asiento trasero no lleva el cinturón abrocha-
do, no sólo se pone en peligro a sí mismo si-
no también a los ocupantes de los asientos
›››
delanteros
fig.
12.