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Montaje
Montaje
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Entrehierro
Entrehierro
En caso de interrupción de la corriente continua, se inducen puntas de tensión
u
mediante la bobina del electroimán, cuya altura depende según la siguiente
q
relación de la inductividad propia L de la bobina y de la velocidad de desco-
nexión di/dt:
di
u
= L ·
q
dt
Dependiendo del tipo de bobinado, la inductividad L aumenta con la tensión
asignada de las bobinas. En caso de tensiones de bobina elevadas, las puntas
de tensión de desconexión pueden ser peligrosas. Por este motivo, todos los
frenos para tensiones superiores a 24 V se conectan con un varistor.
El varistor sirve únicamente como protector de la bobina del electroimán y no
como protección de los componentes o aparatos electrónicos periféricos con-
tra fallos de compatibilidad electromagnética.
Sobre demanda, los frenos para tensiones inferiores o iguales a 24V también
pueden estar dotados de varistor.
Si la interrupción de la corriente continua tiene lugar por un interruptor manual,
se producirá con los arcos voltaicos originados una mayor erosión eléctrica en
los contactos de conmutación. Por lo tanto, para este cometido sólo deberán
utilizarse contactores de corriente continua o contactores de corriente alterna
adaptados con contactos de la categoría de uso AC3 según la EN 60947-4-1.
En general, los frenos de resorte están montados en el motor listos para el ser-
vicio.
En caso de montaje posterior, en primer lugar tiene que calentarse el cubo de
arrastre (7 en la figura 1) hasta aproximadamente 80° C y deslizarlo en el extre-
mo extendido del eje del rotor.
A continuación, el freno también puede colocarse por desplazamiento me-
diante ligeros golpes en el saliente de centrado situado en el casquete o en
la placa de cojinete B del motor y luego fijarse. Los tornillos de fijación deben
asegurarse mediante unas bases apropiadas a fin de que no se aflojen.
Después de que se realice la conexión eléctrica, el freno estará listo para el
servicio.
El desgaste de los discos de freno originado a lo largo del servicio es el causan-
te de un ensanchamiento del entrehierro que, no obstante, no provoca ningu-
na disminución importante del momento de frenado.
Sin embargo, en caso de aumento del entrehierro deberá contarse con tiem-
pos de reacción ligeramente más altos.
Para que se pueda seguir garantizando un funcionamiento perfecto de los fre-
nos, es imprescindible que se respeten los valores máximos para el entrehierro
o los mínimos para el espesor del disco de freno indicado en el apartado 9. Los
discos de freno tendrán que sustituirse como muy tarde cuando se alcancen
estos valores límite (véase apartado8.2).
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