– Inserte un poco una escobilla nueva de la mis-
ma longitud y tipo en el brazo del limpiacrista-
les, en el sentido de la flecha, y engánchela de
nuevo en el brazo. A continuación, tire de la
escobilla en el sentido contrario al de la flecha
hasta que encastre.
– Apoye los brazos del limpiacristales sobre el
parabrisas o la luneta con cuidado.
Variante : cambiar la escobilla
limpiacristales de la luneta
– Para levantar un brazo del limpiacristales, agá-
rrelo solo por la zona donde va fijada la escobi-
lla.
– Mantenga presionado el desbloqueo
fig. 144
y, a continuación, doble la parte
3
→
superior de la escobilla en el sentido de la fle-
cha
y extráigala en el sentido de la flecha
A
fig. 144
. Es probable que tenga que em-
→
B
plear bastante fuerza.
– Inserte una escobilla nueva de la misma longi-
tud y tipo en el brazo del limpiacristales en el
sentido contrario al de la flecha
hasta que encastre. Para ello, la escobilla debe
estar doblada
fig. 144
→
– Apoye el brazo del limpiacristales sobre la lu-
neta.
Limpieza y cambio de las escobillas limpiacristales (vehículo sedán, Ameo)
Fig. 145 Cambiar las escobillas limpiacristales: variantes , y .
Las escobillas limpiacristales montadas de fábrica
van provistas de una capa de grafito. Esta capa es
la responsable de que el barrido sobre el cristal
tenga lugar de forma silenciosa. Si la capa está
dañada, entre otras cosas aumentará el ruido al
producirse el barrido sobre el cristal.
172
Manual de instrucciones
fig. 144
→
B
.
A
ADVERTENCIA
Cuando se utilizan escobillas limpiacristales
desgastadas o sucias, se reduce la visibilidad y
aumenta el riesgo de que se produzcan acci-
dentes y lesiones graves.
● Sustituya las escobillas siempre que estén en
mal estado o desgastadas y ya no limpien los
cristales lo suficiente.
AVISO
Si las escobillas limpiacristales están dañadas o
sucias, pueden rayar los cristales.
● No utilice productos que contengan disolven-
tes, esponjas ásperas u objetos afilados para
limpiar las escobillas, pues pueden dañar la ca-
pa de grafito de las mismas.
● No limpie nunca los cristales con combustible,
quitaesmalte, diluyente de pintura ni líquidos
similares.
Compruebe con regularidad el estado de las es-
cobillas limpiacristales. Si las escobillas se desli-
zan con dificultad, cámbielas en caso de deterio-
ro o límpielas si están sucias
.
→