seguridad que se hayan distendido en exceso
a causa del esfuerzo al que han sido someti-
dos. Puede que sea necesario sustituirlos in-
cluso cuando no haya daños perceptibles.
También se deberán comprobar los anclajes
de los cinturones.
● No intente nunca usted mismo reparar, mo-
dificar o desmontar los cinturones de seguri-
dad. Las reparaciones en los cinturones de
Testigo de advertencia
Tenga en cuenta
, al principio de este capí-
tulo, en la página 10.
Fig. 2 En el cuadro de instrumentos: testigo de ad-
vertencia.
Se en-
ciende o
Posible causa
parpadea
El conductor no lleva abrochado el cintu-
rón de seguridad.
El acompañante no lleva abrochado el cin-
turón de seguridad (en caso de que el
asiento del acompañante vaya ocupado).
Hay objetos encima del asiento del acom-
pañante.
Uno de los ocupantes de las plazas trase-
ras no lleva abrochado el cinturón de se-
guridad.
Uno de los ocupantes de las plazas trase-
ras lleva abrochado el cinturón de seguri-
dad.
Al conectar el encendido se encienden breve-
mente algunos testigos de advertencia y de con-
trol a modo de comprobación del funcionamien-
to. Al cabo de unos segundos se apagan.
seguridad, los enrolladores automáticos y los
cierres únicamente deberá llevarlas a cabo
un taller especializado.
Fig. 3 En la pantalla del cuadro de instrumentos: in-
dicación del estado de los cinturones de seguridad
de las plazas traseras.
Solución
Abrocharse el cinturón de seguridad.
Retirar los objetos del asiento del acompañan-
te y guardarlos en un lugar seguro.
Abrocharse el cinturón de seguridad.
Seguridad
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